Marketing, tecnología y vida

El subsistema de formación profesional para el empleo, en las acciones dirigidas prioritariamente a trabajadores ocupados se divide en:

• Formación de Demanda (formación en las empresas o bonificada), que abarca las acciones formativas de las empresas y los permisos individuales de formación financiados total o parcialmente con fondos públicos, para responder a las necesidades específicas de formación planteadas por las empresas y sus trabajadores
• formación de oferta, que comprende los planes de formación dirigidos prioritariamente a trabajadores ocupados con el fin de ofrecerles una formación que les capacite para el desempeño cualificado de las profesiones y el acceso al empleo.

A grandes rasgos en la formación de demanda, es el empresario, el que lleva el liderazgo en su planificación, cada empresa tiene cada año un crédito asignado que si lo invierte en formación se lo puede bonificar posteriormente de las cotizaciones a la seguridad social. Por otro lado en la formación de oferta, son las administraciones públicas (estatal y autonómicas) la que convocan ayudas, a las que se presentan tanto los agentes sociales como en algunas de ellas centros de formación acreditados. Luego los agentes sociales -organizaciones empresariales, las organizaciones sindicales, las organizaciones de economía social y de autónomos- junto a los centros de formación acreditados la imparten.

En el gráfico podemos ver la evolución de estas partidas:

• Formación de demanda = Formación bonificada
• Formación de oferta = Agentes Sociales Estatales + Comunidades Autónomas

Vía: Expansión, Más empresas, menos agentes sociales
Vía: Fundación Tripartita, El origen y destino de los fondos públicos dedicados a Formación para el Empleo en 2012

Etiquetas: mercado formación